Lo que cuesta y lo que vale

Uno piensa en curro y ya se imagina haciendo tareas de mierda para otros, raramente tienes fantasías en las que vienen a pagarte por algo que sale de tus manos, como un bien de mercado en el que no se valora el producto, sino la productividad.

No me gustaba la asignatura de economía, no presto atención a la pasta. Así que vivo sin pretenderlo, del garrapatismo más descarado. No planeo mi medio de vida, sólo desprecio trabajos como el de mi único familiar directo con empleo remunerado. Una persona que nos suministra papel verde ganado con su esfuerzo, siendo como es para ella, el medio lógico de conseguir cualquier cosa. No todo vale, sino todo cuesta.

En estas últimas semanas, he observado la misma diferencia en la administración de la vida en distintas personas cercanas. Básicamente lo que vale es el pasado, lo que cuesta el futuro, y el presente es un puente necesario que nos traslada del aprecio al sacrificio.

Vale que soy una niñata inmadura que acabará en la indigencia (si no material, moral quizás). Pero me cuesta ver la total falta de aprecio que tiene la buena gente por todo lo conseguido? alguna vez.

Aunque luego lo hayas perdido en la ruleta.